Kikko es la palabra japonesa para hexágono y significa ‘caparazón de tortuga’. Hace una referencia a ese animal, la tortuga, que simboliza principalmente longevidad y felicidad en la cultura nipona.
Se utiliza en Japón para decorar objetos desde la era Nara (645-794) y se hizo popular en la era Heian (794-1185). Generalmente el Kikko aparece en forma de patrón geométrico y tiene numerosas variaciones, como pueden ser el Bishamon Kikko o el Kawari Bishamon Kikko.